Fuente de As Burgas y, detrás, la piscina que lleva varios días cerrada al público. (MARTIÑO PINAL)
Entre enero y mayo se situó en el último lugar de Galicia por pernoctaciones y en el quinto mes, entre los peores de España
ANTONIO NESPEREIRA * 22/06/2019
Arranca el verano y los equipamientos termales de la ciudad —entre otros servicios turísticos— arrastran serias carencias. A su vez, los datos de pernoctaciones también alejan a la capital del resto de destinos de la comunidad autónoma. Ayer mismo el Instituto Nacional de Estadística (INE) facilitó, entre otros, los datos de pernoctaciones acumuladas entre enero y mayo. De acuerdo con este observatorio oficial Ourense se sitúa con 88.027, por detrás de destinos urbanos como A Coruña (330.439), Santiago (476.178), Lugo (104.334) o Vigo (316.708).
Pero, además, si tomamos las cifras del mes de mayo la capital se sitúa entre las de provincia que tienen peores registros por el número de viajeros de toda España. La ciudad de As Burgas registró el pasado mes 12.232 visitantes pero urbes de menor tamaño como Zamora lograron atraer a 14.538. Otras capitales de provincia, tradicionalmente más empobrecidas que Ourense, caso de Teruel, recogen también mejores frutos turísticos, al sumar más de 15.000 visitantes.
Casos parecidos se describen en Cuenca, Ciudad Real o Badajoz. Pero hasta Soria, que tiene menos de 40.000 habitantes y menos equipamientos en su capital, prácticamente tuvo el mismo número de pernoctaciones (19.000) que Ourense, que llegó a 20.243, pese a tener más de 105.000 habitantes y más equipamientos que la ciudad castellana.
Tampoco las comparaciones en la temporada alta son excesivamente ventajosas para Ourense. Si analizamos cómo ha sido el mes de agosto del año pasado en los destinos turísticos vemos que Ourense, con 24.862 pernoctaciones, se sitúa de nuevo en el farolillo rojo entre las capitales de provincia gallegas. Obviamente, el factor playa favorece a destinos como Vigo o A Coruña y Santiago recibe el empuje del Camino, pero Lugo tiene análogas condiciones a Ourense y logró atraer 33.068 pernoctaciones. También destinos de costa con escasos habitantes como Viveiro o Ribadeo, compitieron de tú a tú con el turismo ourensano.
Tampoco en mayo de este año ayudan cifras como la estancia media por puntos turísticos, que deja a la capital ourensana de nuevo en el farolillo rojo, con 1,65 días de media, por debajo de A Coruña (2,02 días), Santiago (1,76), Lugo (2,00), Ribadeo (1,71), Viveiro (1,87), O Grove (2,22), Sanxenxo (2,68) y Vigo (2,14).
Estado de las dotaciones
Uno de los activos promocionales de la ciudad en los últimos años ha sido el termalismo. "Ourense, ciudad termal" es el reclamo para atraer turistas. Sin embargo, algunas de sus dotaciones públicas no están preparadas en el arranque del verano. Las termas privadas de A Chavasqueira seguirán inutilizadas durante meses como consecuencia del incendio ocurrido en abril y sin que por el momento se sepa cuando puedan estar operativas.
La piscina termal de As Burgas, al lado de las emblemáticas fuentes y uno de los espacios más visitados, se encuentra cerrada y la fecha de apertura ha sufrido ya algunos cambios. El mantenimiento de algunos espacios abiertos, caso de Outariz, evidencia necesidad de mejora, sobre todo la pasarela que une ambas orillas del Miño, llena de pintadas y con charcos cuando caen algunas precipitaciones.
El aparcamiento por la carretera de Alongos, al lado de la depuradora, mezcla el estacionamiento de vehículos con la asentamiento de autocaravanas, lindando con un antiguo negocio hostelero vencido por el abandono. En el entorno del Campo da Feira también se instalan autocaravanas en un lugar no regulado y, al lado de la llamada buvette termal, una instalación con agua caliente de la traída —pese a que se prometió termal—, en la que se gastó casi medio millón de euros, sigue sin funcionar desde año 2013.
Fuente:
No hay comentarios:
Publicar un comentario